domingo, 1 de agosto de 2010

Mirarlo despierta

Hazme el amor ráfaga estúpida, psique imaginativa ensoñada. Vuelve a ésta, que es la única que tenemos, que respiro con cada orgasmo que me pones en la boca. Salte de allí, divorciate de las sábanas, húndete tanto como puedas a esta realidad, en esta verdad que peca de antónima. Dame todo eso que no puedo oler ni compartir. Premoiciones volubles entréguenme la medula mágica.