Me dijo –No puedo
Y se me murió
Se me murió en las manos
En las lágrimas
Diluyo su cuerpo, su alma
Se me escapo a la eterna noche
Le grite a lenguas hirviente
-No te vayas-
Y me dejo
Cómo sombra
En las sombras
Escurriéndome por las paredes
Ya no está
Al irse, me fui
Le dije
-Despierta-
Y no despertó.
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